La Due Diligence en el mercado inmobiliario

17/05/2016
El mercado inmobiliario es uno de los terrenos más complejos en los que una persona puede verse involucrada si no posee la capacidad y los conocimientos requeridos para resolver cuestiones relacionadas con este sector ni las herramientas necesarias para llevar a cabo negociaciones satisfactorias.

El mercado inmobiliario es uno de los terrenos más complejos en los que una persona puede verse involucrada si no posee la capacidad y los conocimientos requeridos para resolver cuestiones relacionadas con este sector ni las herramientas necesarias para llevar a cabo negociaciones satisfactorias. Antes de invertir en un mercado de este tipo quiero que conozcáis la Due Diligence, un recurso excelente para vendedores y clientes.

¿Qué es la Due Diligence?

La Due Diligence es un término relacionado con el mundo empresarial que poco a poco ha ido adaptándose al contexto inmobiliario. Hoy en día no se puede cerrar una venta de este tipo sin la presencia de la Due Diligence ya que esta facilita el objetivo de obtener el máximo valor del inmueble en beneficio del vendedor. Ésto se hace bajo todas las formas de ley y es un tipo de auditoría necesaria para convencer al comprador y engrandecer al vendedor, otorgando confianza y transparencia a ambas partes.

¿Quién se encarga de este proceso?

A tenor de lo mencionado con anterioridad, es fácil deducir que el responsable de poner en juego este recurso debe ser un gestor inmobiliario experto como, por ejemplo, los que forman nuestro equipo de empresa consultora inmobiliaria en Barcelona, capaces de lograr el objetivo primordial en un espacio de tiempo acorde a las necesidades y requerimientos del vendedor. Uno de los papeles del gestor inmobiliario, en este caso, será ofrecer el acceso a toda la información que rodea al proceso de manera totalmente transparente para ambas partes y facilitar dicha información de manera accesible en todo momento.

Desde hace tiempo, se viene exigiendo en España que en estos procesos se ofrezca  la información que abarque hasta el último detalle relacionado con los activos ofrecidos. Se realizan auditorías sobre el inmueble de todo tipo, se analizan otros de similares características, se llevan a cabo estudios de mercado, etc. Es decir, que no sólo se dispone de una mayor cantidad de información, sino que es de mayor calidad, más accesible y mejor gestionada por un profesional.

Evitando el riesgo de hipotéticas manipulaciones de las partes involucradas, se otorga una mayor confianza a la negociación, siendo administrada por un elemento independiente que es el gestor inmobiliario. Además, esto repercute positivamente en la calidad de ofertas realizadas por parte de los inversores, quienes, gracias a la confianza ofrecida por la Due Diligence, muestran un mayor interés en el inmueble.